Confession...

Todo en el cuarto no cambio en nada solo que al entrar lo que llamaba la atención desde la sala era la pecera, no pensó que se vería tan bien incluso le agradaba en esos dos días de su regreso se encontró relajado al observar a los peces quedándose dormido en el sillón. El empleado a cargo de ellos hizo bien su trabajo.
No necesitaba guiar a Hayato estando en una anterior ocasión no había cambiado nada en el lugar, excepto en la habitación donde un retrato de él junto a Bosheng, el abuelo y su ahora sobrino se encontraban, curiosamente la expresión de los tres parecía menos dura alrededor del pequeño en brazos de su padre junto a Ziang a su lado y el abuelo sentado en medio, justo como la familia tradicional que eran, todos portando un hanfu tradicional casi podían pasar por una familia de los años de antaño. El pequeño de dos años ahora llevaba su anterior nombre un descarado anuncio sobre la cercanía con Bosheng; dejando de lado el hecho de quién era hijo el niño, se encariño con él rápidamente, disfruto de la experiencia de sostener un diminuto cuerpo ya que nunca tendría la oportunidad conociendo sus preferencias.
Atrapo por detrás a Hayato se sentía extrañamente tranquilo al pensar en lo acontecido esas dos, extrañaba tanto sentir el cuerpo cálido de su amante.

– wo ai ni –

Entró en el hotel,viendolo todo igual,como en la habitación.Al cerrar la puerta miró hacia la pecera,viendo a dos pececillos nadando.Por detras Ziang lo abrazó y le dijo aquellas palabras,no sabia hablar chino,pero tenian ciertos parecidos en sus kanjis,y el kanji de amor era el mismo y se pronunciaba igual,por ello entendió su significado.Como pudo se dio la vuelta y lo abrazó.-...aishiteru mo..-le respondió.
Lo miró a los ojos unos instantes.-...prometistes que la proxima me llevarias contigo...-le recordó.Tenia muchas ganas por conocer todo el entorno familiar de Ziang..aunque no las mismas por dar a conocer a Ziang a su familia,temía la reacción de su familia,y que tomasen medidas contra Ziang para separarles.Se separó de él un poco y fue a echarse sobre la cama,se sentía algo adolorido y cansado,aquella paliza solo habia ocurrido hacía un par de dias y aun tenia los golpes recientes,sus costillas estaban amoratadas,se veía bastante feo,ademas tambien tenia por el abdomen,los brazos,espalda y piernas,aunque esto ultimo en menos medida.

Se entendía fácilmente lo que quería decirle, palabras tan simples y a la vez difíciles de decir cuando no se sienten pero este no era el caso claramente – ¿quién dijo que los japoneses y los chinos no se entendían? –
Dejo ir al preciado premio de entre sus brazos. Lo siguió con la mirada, lucía algo cansado incluso se había acostado en la cama como si no hubiese descansado bien en días.
– ¿Qué sucede? – mientras preguntaba se quito el saco dejándolo en el armario y arremango su camisa hasta los codos, se acerco a palpar la frente de Hayato para ver si tenía fiebre rozando la herida de su ceja, por suerte tenía fiebre – Te duele algo – se sentó en la orilla de la cama acariciando el cabello del menor. Estaba acostumbrado a lidiar con Misha cuando se enfermaba o tenía sus accidentes cada que iba por ahí en la nieve a esquiar y regresaba con las rodillas totalmente raspadas.

Lo vio acercarse y palparle la frente por si tenia fiebre,que no era el caso,y preguntarle por su estado.-..me duele todo..-dijo con una sonrisita.No le mentiría,se sentia dolorido,nunca le habian pegado,ni tan solo un bofetón,y aquello habia superado los limites de su aguante fisico,y porque no decirlo,habia pasado mucho miedo,aunque no lo hubiera demostrado en su momento.

Traía puesta la ropa que en su dia Ziang le compró.Puso las manos en el borde de la camiseta y se la subió,dejando ver su cuerpo amoratado,desde tonos verdes, a color morado oscuro,bastante feo.
-..Misha me llevó a casa de un amigo suyo a que me curasen...-indicó para que supiera que habia sido atendido.-..tengo alguna costilla golpeada...por eso cuando respiro hondo me duele...-explicó mirandole,no pretendia preocuparle,pero queria que supiese lo que le dolia mas.

Frunció el ceño al ver el golpeado cuerpo de Hayato, quien quiera que fuera el que dejo esas marcas en su amante no iba a quedar sin recibir lo que se merecía. Le daba un punto extra a Misha por haber actuado a tiempo y saber qué hacer, demostraba que estaba creciendo y convirtiéndose en un joven inteligente.
– ¿Estas seguro que solo es un golpe en tu costilla? – las marcas se miraban bastante feas en la blanca piel, se podía ver fácilmente cuales ya iban sanando de las que no. El no era medico pero tenía bastante experiencia con las heridas a veces un simple golpe no lo era del todo escondiendo heridas más complicada: palpó con cuidado el área señalada del dolor cuidando no presionar demasiado, se retiro cuando Hayato dio un leve respingo por el dolor, todo estaba en su lugar solo se trataban de heridas superficiales, es lo bueno de contar con un matasanos decente.
Solo se trataba menguar el dolor y cuidar del maltratado cuerpo. Sacó de su buró unas de los siempre confiables ungüentos de la abuela ella le enseño como tratar sus heridas nunca dejaba de lado las medicinas que preparaba para él, siempre preocupada de que saliera lastimado aun mas después del incidente con Leonid.

– Te ayudara a calmar el dolor y ayudara a sanar tus contusiones. Puedes quitarlo con agua caliente cuando regreses a tu habitación, solo deja que actué mientras estas aquí, el olor se irá cuando lo laves – le mostro el botecito que contenía el ungüento y quito por completo la camisa de Hayato dejándola a un lado, comenzó a poner con suaves masajes la aceitosa crema con olor a hiervas y raíces, el olor siempre le recordaba como olía el jardín de la abuela después de un día lluvioso y las polillas volaban alrededor de la lámpara fuera de su ventana. Cual ritual terminó de aplicar el bálsamo por el torso de Hayato, gustaba de cuidar de su amante el recorrer cada hematoma lo hacía con sumo cuidado como si fuese a romperse a la menor provocación, sus planes para conmemorar su regreso podían esperar hasta que el delicado cuerpo sanase.

Dejo el bálsamo sobre el buró a lado de la cama – Preparare un poco de té que ayude a relajarte –

-..creo que solo son superficiales..menos la que te he dicho....-su costilla tambien habia sido golpeada,no solo la piel y estaba algo resentida.
Se dejó quitar la camiseta y vio como le aplicaba el unguento por el torso.-..frio..-dijo al sentir el frio gel.Pero las manos de Ziang pronto calentaron su piel,lo hacia con tanto cuidado y delicadeza,que sentía como mimaba su cuerpo,algo que habia echado en falta.
Al terminar se quedó en el sitio.-Gracias...-agradeció la ayuda y el té.-..pero solo quiero estar junto a tí...-se incorporó ,sentandose sobre la cama.Lo miró con algo de timidez.-...quiero...hacer...hacerlo contigo...-sabía que su cuerpo no estaba para esa marcha,pero su deseo era mas fuerte que cualquier dolor.

En sus planes no estaba el sacar provecha de la situación, si, espero mucho para ver y sentir ese cuerpo pero no quería lastimar o sobre exigirle a su cuerpo. Espero pacientemente a su regreso para poder estar juntos de nuevo, en sus pocos ratos libre se encontró recordando su nueva persona especial, volver a tenerle entre sus brazos.
Con solo decir que quería hacerlo sus buenas intenciones se iban por la borda, él podía esperar a que mejorase pero la verdad también lo quería hacer desde que lo vio.

– En verdad sabes cómo hacer que olvide mi sentido común – se acerco a besarlo – se supone que deba cuidarte – dijo con falsa resignación.

Dejando de lado todo síntoma de renuencia lo atrajo hacia él, con su nariz acaricio su largo cuello: oliendo el agradable aroma de su piel, justo como lo recordaba. Lo recostó en la cama y dio un pequeño beso en cada sitio donde los hematomas marcaban la piel de Hayato, como si al hacerlo fuese a curar las oscuras manchas, siempre cuidando al por mayor lo que hacía.

Extrañaba la textura de su piel sentirla con los labios, aumentando su deseo por probar el sabor de Hayato.

Soltó un a risita cuando escuchó su frase.-..tambien tú me haces perderlo..-se dejó recostar y mientras besaba su piel,él acariciaba sus cabellos,disfrutando su tacto y sus caricias cerrando los ojos.-...Ziang.....-dijo en un suspiro.Cuando lo tuvo rostro con rostro,comenzó a desabrocharle la camisa,entonces una vez hecho acarició su perfecto torso,bien trabajado,recordando la promesa de Ziang de enseñarle su estilo de lucha,del cual habia olvidado el nombre.
Pasó los brazos alrededor de su torso y lo pegó al suyo,queria sentir sus pieles juntas,sentir su calor,su respiración y sus latidos.-...te amo Ziang..-dijo con su voz,que estaba entre la de un niño y un adulto,aun cambiando.

Lo sostuvo con una mano al Hayato juntar sus cuerpos, la distancia parecía hacer mella en el menor haciéndolo más activo para mover sus pequeñas manos por todo su pectorales, agradeciendo poder conocer lo que deseaba su joven compañero, rodo invirtiendo las posiciones así todo el peso lo sostendría él y facilitaría lo que Hayato tuviera en mente hacer.
Amor...si el también lo amaba, amaba cada parte de él – yo también... – le dio un tierno beso y perspicazmente lo acomodo sobre su entre pierna donde podía rozar donde su miembro comenzaba a despertar. Agarrándolo de la cintura lo empujo sobre despierta anatomía, ambos llevaban todavía las prendas que cubrían sus cuerpos de la cintura para abajo. La anticipada acción lo llevo a avivar su gran necesidad, teniendo en cuanta que paso dos semanas sin poder sentirlo y la autosatisfacción nunca lograba satisfacerlo – que ironía – dejándolo verdaderamente frustrado. Nada le era tan placentero como sentir el calor de un cuerpo envolviéndolo.
Quito de una vez el resto de la ropa de Hayato; se detuvo a observarlo, ahí, sentado sobre él con su piel expuesta y su deseo desbordándose por sus ojos, hipnotizándolo... todo le parecía una bella visión excepto por las feas marcas sobre su piel tiñéndola de un color desagradable pero no importaba pronto sanaría y no quedaría rastro de tal ultraje. Sentándose sobre la cama se apoyó de la cabecera, extendió su mano para poder llegar a los suaves labios de Hayato los acaricio siguiendo la forma – abre – ordeno, metió su dedo pulgar a la pequeña cavidad – lámelo – sentir la suave lengua jugando con su dedo le daba una perfecta visión de lo iba a ser lo siguiente –hazlo aquí ahora – llevo una de las manos de Hayato sobre su notorio bulto.

En pocos segundos se vio sentado encima de Ziang,no sabia con que ojos le estaria mirando,pero seguro estarian llenos de lujuria.Movió un poco sus caderas,provocando cierto roce entre su trasero y su muslo.
Abrió un poco los labios ante la orden de que abriera la boca,y como pidió,lamió su dedo acariciandolo con su lengua.
Al sacarlo miró hacia abajo,Ziang aun llevaba los pantalones puestos,pero podia notarse aquel bulto a causa de su erección.Se bajó de su pierna,colocandose entre las dos,y comenzó a desabrocharle el cinturón,siguiendo el botón y la cremallera.
Con algo de dificultad logró retirarle los pantalones,lanzandolos al suelo.Suspiró alviviado al deshacerse de esa molesta prenda y regresó entre sus piernas.Enrojeció al notar visiblemente como el miembro de su pareja casi ni cabía dentro de su propia ropa interior.Puso las manos en el borde y los bajó un poco,lo suficiente como para que su imponente miembro se irguiera como si estuviera aprisionado a presión bajo la ropa.No pudo disimular un pequeño sobresalto al verlo aparecer tan de repente.Miró a Ziang con algo de timidez mientras llevaba ambas manos a su miembro,acariciandolo desde la base hasta el extremo.-..que caliente y duro...-comentó.Casi podia sentir sus latidos por las venas.
Se agachó frente a él,sujetandolo con una mano,abrió sus pequeños labios y se metió poco mas de la punta en l a boca.Con la lengua hizo circulos alrededor de su glande,y luego se lo metió un poco mas en la boca,hasta casi la mitad,apenas le cabia mas.

Sonrió ampliamente a la sorprendida mirada de Hayato luego de descubrir su creciente erección – Es tu culpa – la sutileza no formaba parte de su personalidad en el presente escenario en gran medida con la hermosa visión de los rosados labios alrededor de su miembro, nada se comparaba con eso, pensándolo bien si había algo que lo superaba y era la forma en que lo hacía, con su nula experiencia solo bastaba con su toque para llevarlo a sentir en realmente excitado.
Se contenía para no empujarse dentro de aquella boca hasta el fondo, además de que no podría sin embargo no evito mover las caderas. No le parecía justo que solo él disfrutara.
– Espera un minuto, ven aquí – fácilmente lo alzo y lo coloco encima de él una vez más pero colocando su lindo trasero hacia al frente para poder brindarlo un poco del placer que él sentía, sobre todo preparar su fruncida entrada. Pasó su lengua por el excitado miembro de Hayato no cabía duda que también se encontraba ansioso por ser tocado – No te detengas – lo animo a continuar con lo que estaba haciendo en un principio, continuo con las caricias probo golosamente la longitud de ese falo, al probar las gotas del presemen arrastro invertebrado musculo por sus texturizados genitales recorriendo el camino hasta llegar a su ansiado premio.
Anteriormente no tuvo la oportunidad de probar la pequeña entrada, tomó entre sus manos las dos suaves mejillas apartándolas lo suficiente para poder observar el sonrosado agujero que a simple vista se podía apreciar que se anticipaba a las sensaciones. Antes de perderse en sus pensamientos empezó a besa esa área, sabía lo especialmente sensitiva que era, lamia y presionaba con su lengua para abrirse paso poco a poco, las reacciones no se hicieron esperar.

Se sintió liviano,Ziang lo podia mover a su antojo con mucha facilidad.Al sentir su lengua por su entrada,intentando abrirse paso,tan calida y humeda,no pudo evitar tener pequeños espasmos de placer en su entrada.-..ah..-soltó un leve gemido de placer.Con su mano masturbaba el erguido miembro de su pareja,luego continuó lo que hacia,sintiendo el placer que el mayor le proporcionaba se metió de nuevo el miembro en la boca y continuó succionandolo.
Con un esfuerzo abrió la boca lo mas que pudo y se metió el miembro en la boca hasta la base,repitiendo el acto varias veces hasta que necesitó tomar aire.
Se sentía muy excitado,su propio miembro estaba mas duro de lo normal,y en parte,parecia haber crecido un poco mas,ademas mostraba un poco mas de vello,poco a poco,o quizas muy rapido,Hayato estaba creciendo,cosa inevitable a su edad,cuando todos los cambios importantes sucedian en poco mas de un año.

Estaba seguro que pronto llegaría a su límite con mayor rapidez que en ocasiones anteriores, bastante lógico tomando en cuenta sus dos semanas fuera del juego, se estaba volviendo loco al sentir la deliciosa boca de Hayato tomando todo su miembro lo estremecía, sin dejar de lado que al mismo tiempo disfrutaba de dilatar ayudándose con la esencia del propio niño que ya no lo era tanto puesto que su pene parecía crecer en cuanto la excitación amentaba y su sabor resultaba más almizclado, dándole un sabor chispeante. Su lengua era empujada prácticamente siendo succionada por la estirada entrada humedecida por su saliva, por desgracia el grandioso lugar donde haría detonar el placer acumulado en su pareja se encontraba lejos de su alcance; sustituyó entonces su lengua por sus dedos que entraban fácilmente, moviéndolos hasta encontrar el punto exacto dentro del interior de Hayato...
Su temperatura aumentaba en todo su cuerpo concentrándose específicamente en una zona en especial, sus genitales dolían como el infierno, endurecidos, listos para descargarse en cualquier instante, podía sentir su pene palpitando dentro de la boca de Hayato caliente y húmeda, ya no tardaría en llegar, anticipándose al inminente orgasmo puso empeño en su propio trabajo jugando con sus dedos dentro de Hayato se apodero con su boca el pene de su pareja, degustándolo, tomó la punta con su lengua chupando y presionándolo ligeramente, por toda la forma de seta hasta el borde.
Sin poder evitarlo se liberación llego pronto en un bajo gruñido.

Sentir los dedos del mayor en su interior hizo que diese un sobresalto,no por el dolor,sino del placer,por tocar aquella zona tan excitante para cualquier hombre.
Siguió su trabajo con esmero,a veces engullendo su miembro al completo,otras a medias,su garganta sufriria las consecuencias luego.
Como podia gemía entrecortadamente,por el propio acto que realizaba,mas aun cuando Ziang se llevó su miembro a la boca.
Casi sin darse cuenta estaba moviendo sus caderas.Lo que no se esperó fue la inminente descarga de su pareja,sin previo aviso recibió el esperma en su garganta,lo que provocó un atragantamiento.
Tosió,aun sin haber eyaculado él,con el miembro del mayor entre la mano.Eso no tenia otro nombre,sino la inexperiencia.

*habría que poner el +18 en el titulo,no?

que estaba a punto de venirse – lo siento, simplemente... – dejo lo que estaba haciendo, se suponía que debía tener cuidado lo último que quería era ahogar a Hayato con...
Se perdió entre las sensaciones y lo deseaba tanto que se olvido por completo que debía tener cuidado con Hayato tanto por sus lesiones como por su poca experiencia con el sexo – lo siento, tendré más cuidado – lo atrajo contra su pecho y beso su frente luego limpio la cara del menor con su mano retirando los restos del blanco liquido de su cara. A pesar de haberse corrido seguía duro y Hayato todavía no se había corrido, pero no haría nada que su amante no quisiera. Los dos debían de disfrutarlo no solo uno.

(see me había olvidado xD)

Se quitó los lentes y los dejó sobre la mesita mientras dejaba de toser.Se pegó al cuerpo de Ziang cuando lo abrazó,ya sin toser,esa tos le habia causado algo de dolor en sus costillas,pero ya habia pasado.Miró un poco abajo.-...aun...estas...-dijo sin terminar la obvia frase.Miró al mayor a la cara,Saiki aun tenia su erección y su excitación a flor de piel.
Levantó un poco las caderas,y con la mano dirigió el duro y erguido miembro del mayor a su entrada dilatada,situó la punta en su entrada y bajó las caderas,metiendo parte del miembro en su interior,por ello dejó salir un gemido de placer.Ambas manos se situaron sobre los hombros de su pareja,sin mirarle directamente por el rubor por aquella acción.Finalmente de sentó totalmente sobre él,introduciendose así todo su miembro al completo.

Claro que aun estaba “así”, pasaron dos semanas, dos eternas semanas su tener sentir, tocar u oler la piel de la persona que deseaba. Lo normal, siendo un hombre activo con una pareja fija, antes no le importaba tener pareja y si sentía la necesidad simplemente veía la forma satisfacer su deseo pasajero pero siendo Hayato quien era, no nacía en él el deseo en ninguna otra persona. Siendo una persona madura sexualmente activa, dos semanas, era un gran sacrificio la espera sobre todo teniendo alguien que lograba hacer perder su cabeza en un mar de lujuria.
– Fueron dos semanas. Solo te deseo a ti –
Y como diablos evitaba estar tan duro si Hayato encontraba una forma diferente siempre de hacerlo desear cada vez más. Su libido se disparó cuando Hayato tomó la iniciativa luego de aquel incidente, diablos si no. Se dejó hacer, sin su ayuda Hayato tomo todo su miembro hasta la base de su pene quería ver la expresión Hayato al momento de hacerlo, pero por alguna razón no se atrevía a mirarle a la cara – Déjame verte – alzó su rostro desde del mentón. Estando de frente a frente se perdió en la profundidad de sus ojos y comenzó a mover su cadera empujándose atraves de las suaves y calientes paredes sintiendo de lleno la piel por la cual arremetía, esta vez no quedo tiempo para un preservativo, de hecho no importaba, se moría por sentirlo sin el molesto plástico, esto marcaba la diferencia ya no se trataba de una relación cualquiera, quería disfrutar al máximo con Hayato y no tenía de que preocuparse, se encontraba limpio siempre fue cuidadoso con eso para que cuando llegara el día de decidirse por alguien le entregara todo sin ninguna restricción.

Ziang le levantó el rostro para mirarle,se encontraba bastante rojo,no tenia aun por costumbre tomar ese tipo de iniciativas.Justo dirigió su mirada a los ojos de su pareja,cuando movio sus caderas,provocandole un gemido,eso hizo que se ruborizase aun mas.Aquel primer movimiento desató su lado sexual hasta ahora inactivo,poco a poco se iba descubriendo a sí mismo en aquel ámbito,por ello sintió una gran necesidad de moverse,asi que levantando sus caderas inició una serie de movimientos,penetrandose con el miembro del mayor.Pasó los brazos alrededor del cuello del mayor,sin dejar de mirarle,con expresión lujuriosa y en parte inocente.
Realizaba aquellos sensuales y algo torpes movimientos mientras que con los labios entreabiertos dejaba escapar leves jadeos.-..nh..Zi...ah.....quiero.....que me...llenes...quiero sentirme...lleno...de tí.....-dijo con la voz entrecortada por el placer.
Nunca antes habia sentido aquella necesidad,lo quería todo de él,lo necesitaba,lo anhelaba,como si fuese su oxigeno,necesario para vivir.Queria amarlo,tocarlo,sentirlo en todos los aspectos,queria estar a su lado a todas horas,besarle sin descanso,todo aquello pasaba por su mente ahora que lo tenia para él solito.

En cada momento parecía ir al límite. Siguió el ritmo de Hayato que se movía, su cara era excitante mezclando su pasión con la ternura de su expresión que siempre mostraba, sus ojos nublados por el deseo reflejaban claramente sus sentimientos. Separó las dos redondeadas mejillas del trasero de Hayato para poder entrar incluso más profundo si eso podía ser posible, apenas podía mantenerse en control de lo que hacía, la temperatura de su cuerpo subía, sentía como todo se preparaba de nuevo para descargarse de nuevo, un gran incentivo fueron las palabras dichas por su amante. Aumentaba el ritmo a cada paso que sentía su liberación cerca, embistiéndolo hasta el fondo y profundamente, los ruidos obscenos se filtraban por toda la habitación el choque de piel contra piel, desde la base hasta la punta su miembro entraba en el cuerpo dueño de su deseo pidiéndole más. Por mero instinto tomo con su mano el pene de Hayato masturbándolo al mismo ritmo en que sus caderas se movían.
– Así...es como lo quieres – su estilo no era ser un pendenciero, pero... se empujaba tan profundo como podía jodiendo el dulce agujero de Hayato – voy a conceder tu deseo– dijo con su grave voz en su oído. Al ser dominante disfrutaba de tener el control. Lo empujo sobre la cama mientras se ponía de rodillas y se empujaba dentro, su pene pulsa dentro de la cavidad anticipando lo que venía, dando varias estocadas antes de derramarse en el interior de Hayato, en medio de un gran espasmo que recorría todo su cuerpo por su liberación, llenándolo de su caliente semilla.

Agradeció que en el ultimo momento Ziang girase las tornas,pues sentía su cuerpo desfallecer de placer.Jadeaba y gemia sin pudor alguno,en ese momento poco le importaba parecer un obsceno,el placer era lo que mas predominaba en esos instantes,ambos cuerpos excitados,sudorosos,fornicando profundamente,jadeantes.
Estaba a punto de venirse,y cuando Ziang empujó tan adentro su miembro,tan profundo,sintiendo un extraño calor y humedad invadirle,esa sensación hizo que él tambien eyaculase abundantemente sobre su propio cuerpo gimiendo casi de manera desesperada.Bajó su mano a su miembro,exprimiendo hasta la ultima gota de semen que quedaba en él.
Cuando el orgasmo pasó,relajó su cuerpo,jadeando para recuperar el aliento,habia sido de los orgasmos mas intensos que habia tenido hasta el momento.
Miró a Ziang y lo besó con necesidad,aunque no duró mucho,necesitaban aire ambos.
Cuando el mayor retiró su miembro emitió un leve gemido casi molesto.Su dilatada entrada comenzó a expulsar semen,el cual resbalaba por sus nalgas y muslo.

Sintió su frustración volar lejos al venirse dentro de Hayato, mejor sensación no conocía ese tiempo sin él sí que causo estragos en su libido. Sonrió ante el gemido de descontento de su niño al dejar salir de su lindo agujero, no solo él se comportaba como un maniaco del sexo si fuese posible estaría todo el día haciéndolo.
Una hermosa vista se aparecía frente a sus ojos demasiado la más erótica y lasciva escena sacada de sus eróticos sueños ver su simiente saliendo por el ceñido agujerito bajando por su cuerpo, definitivamente tendría otro pedazo del pastel...
Se dejo caer su cuerpo sobre Hayato le resto importancia el ensuciarse con la semilla de su amante, incluso se atrevió a pasar su lengua por cada segmento de piel cubierto por el blanco líquido, degustándolo, amaba su sabor dulce que comenzaba a hacerse más denso. Estaba ansioso por saber cómo sería su sabor dentro de un tiempo más, se recostó a lado de Hayato y lo besó sintiendo los sabores de la saliva y el semen mezclándose en sus bocas. – ¿Estás bien? – No se tomo mucho cuidado esta vez – eso fue... diferente a las otras veces, recuérdame desaparecer al menos una semana de vez en cuando – bien sus bajos instintos estaban satisfecho pero quería hacerlo de la forma correcta, por ahora podría esperar para continuar luego.

Asintió con un leve gemido.-..si..-cuando Ziang se recostó a su lado lo abrazó poniendo la cabeza sobre su hombro,poniendo la mano sobre su pecho,sintiendo su respiracion aun accelerada y sus latidos.Soltó una risita ante su ultimo comentario.-Yo prefiero que te quedes conmigo..y hacerlo de esta manera todas las veces posibles..-dijo sin mirarle directamente,decir esos atrevimientos,tan directos y explicitoe,le causaban rubor.Hizo un gran suspiro,recuperando su normalidad.-...Ziang.....algun dia....cuando crezca un poco mas.......po....podré....-eso que iba a preguntar le daba demasiada verguenza.-...podré....probar como...seme?...contigo...claro....-era una de las tantas curiosidades que tenía,que se sentía al ser el seme.Obviamente probarlo ahora seria algo triste,pues habia demasiada diferencia entre sus cuerpos,y al ser menor en todos los sentidos,le costaría,sinceramente,y ademas quizas Ziang ni lo disfrutase,aunque no tenia muchas espectativas puestas en que Ziang le dejase hacer tal cosa,sabía que habia hombres que por nada del mundo querian ceder ante nada ni nadie,y Ziang parecia ser de esas personas firmes.
Escondió un poco el rostro,rojo si podia mas,tras aquella pregunta algo indiscreta pero llena de curiosidad.

¿Hacerlo todas las veces de esa forma?, demonios si no, pero hey podrían intentar con otras cosas igual de interesantes. Rio abiertamente ante el comentario no de forma burlona, todo lo contrario fue una risa de satisfacción juguetona de saber que no era el único al que le gustaba jugar de ese modo – lo haremos como quieras– beso la cima de la cabeza de Hayato en su suave y sedoso cabello poniéndole atención hasta ahora. Sí que lucía lindo cuando se avergonzaba y sus mejillas se tornaban rojas al decir lo que pensaba, cando se comportaba de aquel modo lo disfrutaba bastante.
No tardó en pensar la mejor forma de llevar a cabo la nueva propuesta, estaba perdido dentro de ellos que salió de sus pensamientos tan rápido que apenas pudo digerir lo que acababa de escuchar. Un tema que le costaba un tanto tratar porque le resultaba un poco difícil aceptar ser sometido por otra persona ya sea por su educación fue el de servir, también le inculcaron un orgullo férreo a no doblegarse fácilmente bastante contradictorio cuando lo analizó en su momento.
Estar abajo ya lo había hecho y lo disfruto solo que no sucedía a menudo, más bien no sucedía con cualquiera la única persona fue Bosheng ese hombre se metió por debajo de su piel sin siquiera estar invitado derribando todo a su paso, abriendo las puertas para su verdadero yo, que a pesar de ya no estar juntos seguía dándole sorpresas que alegraban su corazón profundamente.
Se quedo meditando en las palabras de Hayato su voz incluso sonó demasiado inseguro para su gusto, ¿lo estaría probando?, simplemente no tenía respuesta a esa pregunta. Él no quería herirlo si su respuesta resultaba decepcionante pero eso era mejor a mentirle – Yo... – en realidad ¿Cuál era el problema?, ya que él hacía exactamente lo mismo – necesitaras crecer rápido y conseguir algo de fuerza – dijo no muy convencido. Después de todo él prefería a un hombre de pareja que a una mujer.

Ante su respuesta,la cual esperaba que fuese de ese estilo,aunque no se esperaba que le dejase alguna posibilidad,levantó la mirada,apoyando el mentón en su pecho,y lo miró.-..p-pues..comeré mucho,y entrenaré mucho..y recuerda que debes enseñarme a luchar..-se colocó encima suyo tumbado,usandolo de colchón,apoyando la barbilla en las dos manos una encima de la otra,mirandole.No debia obsesionarse con ese tema,ya llegaria el dia,fuese cercano o lejano.
En ese momento se dio cuenta de que acababa de manchar ambos cuerpos de su esencia.-...nos bañamos juntos?..-queria hacer demasiadas cosas con él,entre ellas darse un relajante baño juntos,ademas su entrada aun seguia expulsando semen,Ziang habia dejado una muy abundante descarga en su interior,por ello se removio un poco.-...se siente...raro...-pero se sentia bien sabiendo que parte de su pareja aun estaba en su interior.

Ser poco razonable a veces podía controlarlo, en cuanto a hacer caso a sus palabras lo intentaría, se supone que los pequeños sacrificios significan mucho cuando amas a alguien.
Un delicioso peso se posó en su abdomen que recibió con una gustosa bienvenida separo sus piernas para hacerle un mejor espacio entre su cuerpo – no lo he olvidado – al parecer resultaba ser ya un estudiante bastante ansioso, sería agradable que una vez comenzaran siguiera con ese ánimo.
– Me agrada tu idea – necesitaba de una buena ducha – aquí... – llevo sus manos por los redondos glúteos empujando un dedo por el resbaladizo agujero entrando fácilmente debido a que se encontraba totalmente dilatado, jugó con ello unos instantes deteniendose antes de no poder parar.
– vamos – puso los brazos de Hayato alrededor de su cuello y sin problemas lo cargo sosteniéndolo de su trasero. El cuarto del baño era espacioso con un estilo minimalista, la bañera de porcelana lo bastante grande para dos personas al igual que la ducha todo perfectamente distribuido. Lo bajo de sus brazos, puso a llenar la bañera tardaría un poco pero sabía la forma correcta de aprovechar el tiempo – ven aquí – lo atrajo hacia él besándolo con necesidad arrastrandolo dentro de la ducha.

Al parecer no lo habia olvidado,él no solia olvidar las promesas,le gustaba poder cumplirlas,aunque antes de marcharse se supone que le prometió cuidarse,aunque en realidad no fue una promesa,ya le dijo que lo intentaria,lo intentó,aunque sin mucho éxito.
Sintió su dedo por su entrada,resbaladiza por su semen y dilatada aun.-..hmmh...Ziang...-dijo con un leve gemido,con aquello simplemente queria decir que si seguia así volverian a hacerlo,aunque sinceramente,no le importaría estar haciendo el amor con él toda la tarde y noche.
Se dejó cargar hasta el baño,donde esperó a su lado viendo como se llenaba la bañera,pero pronto le tenia entre sus brazos besandole en la ducha.Ya se estaba acostumbrando a besar,a su manera de besar,comenzaba a saber que le gustaba,y por eso abrió sus labios buscando su lengua,y mordiendo con suavidad sus labios.

Sus caricias fueron bien recibidas, bastaba con tocar un centímetro de esa piel para que todo se volviera correcto: caricias, besos, palabras, promesas; se arremolinaban en su cabeza teniendo sentido de forma especial.
Cuidar de Hayato resultaba natural y espontaneo incluso si sus actos reflejaban todo lo contrario, entre besos y caricias lo llevó a la ducha para lavar su cuerpo, posteriormente disfrutaría de la relajantes sales en la bañera, ambos lo necesitaban, se atrevía a aceptar que tenía pensando de disfrutar de su bañera desde antes del viaje con cierta personita.
Gotas de agua comenzaban a cubrirlos en una ligera lluvia artificial, las gotas resbalaban finamente forman caminos húmedos por el delicado cuerpo de Hayato sin dudas le cautivaba aun bajo esas condiciones, por desgracia el agua acentuaba las heridas de su cuerpo haciéndole un desagradable nudo en el estomago al recordar la manera en que llegaron a esos lugares. No lo iba sacar de su cabeza hasta librarse adecuadamente de ese peso negativo.
– Hora de limpiarte – lo miro de provocativamente.

Sintió el agua resbalar por su castigada piel,viendo como tambien resbalaban por el perfecto cuerpo de Ziang,mojando sus cabellos.Se veía tan sexy de esa manera,y mas aun con la mirada con la que dijo aquello.Simplemente pensó que podría deshacerse con tan solo el roce de sus dedos,Ziang lo tenia totalmente cautivado,lo adoraba y admiraba,y ante todo lo amaba.
Buscó con la mirada el gel de ducha,tomó el bote y puso un chorro en su mano,la misma que llevó al pecho del mayor haciendo circulos mientras lo enjabonaba.Su piel se tornó resbaladiza y suave con la espuma,asi que él mismo disfrutó de tocarle en esas condiciones,recorriendo desde su pecho hasta su abdomen,delineando cada forma de sus musculos.Era tan perfecto que no cabia en sí de gozo,saber que ese cuerpo,esa persona,le pertenecía,lo llenaba de satisfacción.
-..porque eres tan perfecto en todo?..-mas que nada era una afirmación.
Se acercó mas a su cuerpo,pasando las manos por detrás,acariciando su fuerte espalda,y bajando a sus glúteos.Ahora que se daba cuenta,nunca habia tocado su trasero.Con ambas manos lo sobó con satisfacción,resultó que tenía un bonito trasero tambien.

Hacia tanto tiempo que no disfrutaba de compartir con alguien un momento íntimo como ese. Se dejo hacer por Hayato en cuanto el niño comenzó enjabonar y lavar su cuerpo, considerando lo bien que se miraban sus manos sobre él; contrario a lo que se podía suponer, el contacto físico era importante para él nadie a primera vista lo sabía solo aquellas personas con la cercanía suficiente lo podían asegurar.

Siendo hombre tener un cuerpo nada despreciable no le incomodaba e incluso podía elevar su ego de vez en cuando, pero perfecto no sería el calificativo correcto para describirlo: algunas cicatrices se dejaban ver, pensándolo bien no le preocupaba, eran parte de su historia y unas representaban más que eso.

-¿Perfecto?, lo dudo mucho- nunca podría alcanzar tan idílica utopía, las razones sobraban - tu estas más cerca que yo de serlo - imitó a Hayato pasando su manos por espalda y hombros del menor enjabonandolo, mientras alguien jugaba con su trasero.

- Cuidado, también soy hombre si funciona contigo, funciona conmigo- aprovecho para eliminar todo espacio entre ellos, rozando sus pieles desnudas e igualmente puso sus manos sobre el trasero de Hayato.

Disfrutó un momento del trasero de Ziang hasta que dijo lo ultimo.-Acaso tienes mas ganas?-dijo pegado a su cuerpo,sus pieles enjabonadas y resbaladizas provocaban una agradable sensacion.
Su curiosidad fue mas allá,una de las manos que tenia en sus gluteos se puso ente medio de ellos,bajó la mano y adentró uno de sus dedos entre ellos,deslizandolo un poco hacia arriba hasta dar con su entrada,algo sorprendido,como si él no tuviera que tener lo mismo o fuera diferente,comprobó que obviamente eran iguales.Asacrició un poco con la yema del dedo su entrada,y seguido bajó un poco,encontrando su perineo y presionandolo casi por acto reflejo.
Se mantenia junto a el,levantóun poco la mirada para ver su expresión.Casi podia decirse que estaba experimentando con él.

– ¿eso es malo? –
Nunca se cansaría de hacerlo mucho menos con la persona que le gustaba, lejos de considerarse un viejo pervertido o un semental lo ponía de ánimos solo estar cerca de Hayato. Paralelos a sus pensamientos seguía atento a cada caricia proporcionada por su amante se sintió extraño al ser objeto de su peculiar atención, paso un largo tiempo desde que alguien jugaba con “esa” parte de su cuerpo pero no evitaba que lo disfrutara, diferente si, malo no; de la misma forma aventuro a sus dedos a ir a un recorrido similar. Rodeo la abertura de su linda entra y se encontró con una agradable bienvenida ya que no se topó con resistencia alguna al introducir uno de sus dentro debido a la reciente sesión de sexo, todavía quedaban unos rastros de su carga anterior.
No se consideraba un adicto al sexo ni un maldito cavernícola para estar todo el día pensando en joder con algo, pero todo en Hayato lo provocaba, sobre todo cuando involuntariamente conseguía satisfacerlo, un ejemplo claro era la forma en que examinaba su cuerpo tocando aquellas partes sensibles que él en anteriores ocasiones le había mostrado, aprendía rápido si le preguntaban. Su mimbro comenzaba a endurecer aun después de haberse venido dos veces, se empujo hacia delante frotando su media erección en el estomago de Hayato por su obvia diferencia de estatura.
Detuvo lo que su niño hacía abruptamente – Todavía no, nos queda mucho por recorrer todavía – finalmente aclaro sus ideas, era una persona normal después de todo necesitaba esperar un poco antes de volver al ruedo – la bañera nos espera – dejó que el agua de la regadera llegara plena a ellos. Limpio alegremente su recuerdo dentro de Hayato.

Rapidamente notó la reacción de Ziang a sus actos,su miembro endureció un poco,notandolo en su vientre.
Emitió un gemido suave al sentir de nuevo aquella invasión,le era una sensación agradable y en parte placentera.
Retiró las manos de lo que hacía por petición de su pareja.Su entrada aun emanaba la esencia que Ziang habia depositado en él,escurriendose por sus muslos junto con el agua,diluyendose.
Subió los brazos a los hombros del mayor,y de un salto se enganchó a él rodeandole con piernas y brazos.-...limpiame bien...-dijo poniendose rojo,obviamente quería que vaciara su interior para que dejase de salir,si no pondría la bañera perdida.

Terminó de limpiarlo por completo, listo para continuar su reencuentro. Cerró la regadera, aun con su niño en brazos dejo que escurrir el agua de sus cuerpos, por nada del mundo pondría en riesgo a ambos por salir mojado y resbalar en el frio piso eso sería muy estúpido de su parte; esperar un par de minutos no dañaría a nadie.
– Te he mencionado lo mucho que me gusta tenerte entre mis brazos – podía sentir los latidos del corazón de Hayato teniéndolo de esa forma abrazado sin dejarlo escapar, ni siquiera lo sentía pesado, tan ligero y delgado. ¿Seguiría siendo igual cuando creciera?...
Lo dejo sobre un pequeño tapete de baño que estaba fuera de la regadera mientras preparaba la bañera, vertiendo aceite de romero al agua caliente eso ayudaría a relajarlos a ambos y sobre todo a Hayato. Juraría que se trataba de un medico herbolario si no fuese porque su facilidad con las plantas no venían precisamente de su especial gusto por las cosas, simplemente agradecía tener una buena instructora, las cosas aprendidas las podía poner en práctica para el cuidado de alguien que le importaba.
Extendió su mano a modo de llamado para que Hayato fuese hacia él.

Sonrió ante su comentario.-A mi me gusta estar entre tus brazos.-tras eso le dio un suave beso en el cuello,justo en su tatuaje.Al salir esperó sobre la alfombrilla a que llenase la bañera.Vio como vertió algo de un botecito,no sabia que era,pero olía como a hierbas,sería algo natural quizas.
Al ver la mano extendida de Ziang la tomó y entró con él en la bañera,sentandose y sintiendo el agradable calor del agua que calmaba sus dolores.-..ahh.....que bien...-cuando Ziang se sentó tambien en la bañera se acercó a él y se sentó encima de él,de espaldas,apoyando la cabeza en su hombro.Era muy relajante.-...gracias...se siente bien....-cerró los ojos.-...oh,no te conté.Me encontré con tu hermano,antes de todo esto..-dijo extendiendo un poco los brazos para que entendiera que era antes de esa paliza.-...al principio me dio algo de miedo...pero puse un poco de mi parte y logramos hablar un poco,hasta que nos caimos bien.Hablamos de cosas...y entre ellas surgió el tema de mi familia...de que tengo que heredar el hospital algun dia...es algo que desde pequeño me han inculcado,así que ya estoy mentalizado para ello,aunque no quiera...y Misha..me hizo una pregunta,si eso era lo que yo quería hacer...me hizo pensar...yo nunca he pensado en otras opciones,así que pensé en que si tuviera que escoger...creo que me gustaría ser abogado o juez...-ladeó un poco la cabeza para mirarle.-...tu que opinas?..

En cuanto Hayato se acomodo entre su cuerpo se abrazó a el cual pulpo y sus ventosas. Le tranquilizaba saber lo narrado Hayato, sobre el encuentro con su hermano, ¿dar un podo de sí?, le parecía increíble que pudiera confiar en Misha hasta el punto de hablarle sobre su familia ya que sabía la naturaleza reservada de su pareja.
–Si realmente es lo que quieres hacer no veo el por qué de no hacerlo... – excelente elección, se necesitaba de una gran confianza e inteligencia ambas cualidades que poseía sin dudas Hayato.
– Dime, ¿Por qué? – pregunta obvia pero él conocía muchos tipos de abogados: aquellos que venden su alma – los que mejor conocía y los más peligrosos – los que van siempre en contra de la marea y luego se rinden cuando se dan cuenta que el mundo es demasiado pesado para llevarlo sobre sus hombros o los que continúan y logran hacer grandes cosas, los que estafaban a las personas ignorantes – seriamente dudaba que fuera de esos – entre otros... ¿Qué lo motivaba? La justicia, las leyes, los derechos, las personas... Sin embargo ser juez eso podría ponerle las cosas algo complicadas debido a su particular estilo de vida y su historial, ya que estarían del lado contrario de la moneda, no obstante la factibilidad de esa opción no le preocupaba en el futuro inmediato.

-..Porque?....pues..siempre me gusta hacer lo correcto...y que la gente actúe como es debido.Tuve un pequeño encontronazo en una hamburgueseria ese mismo dia cuando estaba con Misha.Una pareja habia dejado su bandeja y la mesa llena de su porqueria,yo me queria sentar ahí,así que les pedí con educacion si lo podian retirar,se rieron en mi cara.Yo lo puse todo sobre la bandeja y me levanté,se lo puse delante al chico obligandole a sujetar su basura y regresé a la mesa.El chico regresó y me tiró las cosas por encima.-susprió.-..al igual que con aquel chico que intenté ayudar cuando me hicieron todo esto,no me siento mal,porque se que he hecho lo correcto,aunque sus consecuencias sean malas o negativas,tengo la conciencia tranquila,porque sé que hice lo que debia y lo que me dictaba el corazón.-tras decir eso lo miró.-Crees que ese trabajo es lo adecuado para mi?...yo lo escogí porque realmente no se a que podria dedicarme....quizas deba hacer lo que me dice mi familia y estudiar medicina...salvar vidas y dirigir el hospital que ahora lleva mi padre y mis tios...

Su pequeña fierecilla parecía tener un temperamento de cuidado, sonrió con el simple hecho de aceptarlo se lo pensaría dos veces antes de hacerlo enfadar, si no fuese que cada vez que hacía gala de su personalidad desafiante se metiera en problemas. No era su culpa simplemente tenía la mala suerte de tratar con personas sin educación o sentido de la moralidad, en ocasiones no bastaba lidiar de buena manera con las personas y a veces debías de usar otros métodos, para su felicidad agradecía que Hayato no considerara un opción hacerlo de la forma incorrecta.
– Es perfecto para ti – beso la cima de su cabeza, orgulloso de tenerle como pareja – si realmente es lo que quieres ve por ello, ser medico es una gran responsabilidad no tiene caso que lo hagas si no es lo que quieres, no debes forzarte a hacer algo mucho menos donde la vida de una persona depende completamente de tu vocación – el entusiasmo con el que hablaba, esperaba no lo perdiera nunca, se llevaría uno que otro tropiezo con esa profesión y él estaría ahí para sostenerlo y cuidarlo.
Acarició con la punta de su nariz el hombro de Hayato cual gato – Creo que eres alguien a quien no debo hacer enojar. Miro el lado positivo podría contratarte si mi trasero se mete en problemas, que mejor si es una persona en la que confío y no se enfocara solo en mi bolsillo. ¿Me amarías aun si fuera culpable? – dijo en un tono de broma pero ciertamente no lo era tanto, no debería de tener reservas pero se preguntaba que tanto tendría que ocultar de su vida, sintiéndose un poco mal por no ser del todo sincero en ciertos aspectos que le concernían.

Lo escuchó y se dio la vuelta para tenerlo de frente,apoyando las manos sobre sus hombros.-...yo te defenderé siempre y cuando tus problemas sean consecuencia de un acto al que consideres que hayas obrado con corrección..y...siempre y cuando no me ocultes nada ni me mientas...-se abrazó a su cuello.-...quiero saberlo todo de la persona que amo para poder defenderla como es debido...y si eres culpable realmente de algun acto atroz....solo podré reprocharte el porque lo hicistes...e intentar que no vuelva a suceder..y que sigas el camino correcto.....ése será mi deber..como abogado..y como tu pareja...-dijo sin dejar de abrazarle.

Se acomodo entre las piernas de Hayato rozando cada extensión de piel sobre él – Debo empezar por decir que desde que te conocí tus ojos me atraen – mientras hablaba daba pequeños besos alrededor de su cuello – recuerdo como me obligaste a darte mi nombre eso fue... una gran hazaña, no suelo dar mi nombre a alguien que acabo de conocer – bajo su rostro hasta los rosados pezones del niño pasando su lengua por ellos – no lo entiendo– suavemente mordió los ya duros pezones – he hecho todo lo que se supone no debo hacer, desde que estoy contigo y francamente no me importa – se aferro a los redondeados glúteos de Hayato – me gusta todo sobre ti –

Cerró un poco los ojos al sentir su lengua sobre sus pezones,los cuales reaccionaron en seguida endureciendose.
-..no entiendo bien que quieres decir...-dijo cuando terminó de hablar.Lo ultimo de todo lo habia entendido,pero se le escapaban cosas.Arqueó la espalda al sentir las manos en sus gluteos.-...a mi me encanta todo de tí...tus ojos..tus labios....tu pelo....-fue recorriendo cada parte nombrada con las manos.-..tu pecho...tu..-metió la mano bajo el agua,tocando su miembro.-...todo de tí...me gusta....para mi eres perfecto...aun con tus imperfecciones.-se acercó a sus labios y se los mordió un poco.-...que te gusta de mi?..aparte de mis ojos...-dijoladeando un poco la cabeza con mirada inocente,al contrario que la acción que estaba realizando bajo el agua,tocandole.

– Me impresionaste la primera vez que te conocí, quizás por eso me atreví a besarte – dio un leve suspiro ya que recibía una excelente atención la parte baja de su cuerpo – me gusta la manera en que te haces escuchar – dándole un beso en la mejilla sin mayor pretensión continua hablando – la forma que toman tus sentimientos, es imposible para mi no pensar en tenerte a mi lado– pocas veces llegaba a ser atento y afectivo, solo con quienes se ganan un lugar importante en su vida – cálido, agradable, un lugar donde puedo estar así es como te veo –
Con la misma estimulación su miembro ya se encontraba totalmente erguido de nuevo, unas de sus manos se unió a las de Hayato mientras con la otra lo sostenía, cuidando siempre de él.
– Hazlo de nuevo – se empujo hacia adelante aumentando la fricción entre ellos incitándolo a que se empalara a su miembro solo, ya no podía esperar a llegar a la cama justo ahora lo necesitaba sentir encerrándolo entre su palpitante pared de músculos, no hacía falta prepararlo.

A medida que iba hablando fue sonriendole,le gustaba escuchar eso,se sentía seguro.Al terminar de hablar se abrazó a él con un brazo,pues la otra mano seguia ocupada,sintiendo como su miembro de nuevo estaba duro.
Su petición no se hizo esperar mucho.Retiró la mano de ahí para apoyarla sobre los hombros de Ziang,levantando un poco las caderas para posicionarse sobre su erguido y sumergido miembro.Al sentirlo en su entrada simplemente empujó hacia abajo sin esfuerzo,y su miembro fue entrando de la misma manera,hasta que quedó sentado totalmente encima suyo.
Miró a su pareja y le dio un suave mordisco en el cuello.-...haría el amor contigo...a todas horas...-comentó con cierta lujuria.

Increíble, darse cuenta de la cercanía entre ellos y la manera en que iba evolucionando su relación al igual que nunca se imagino que Hayato podía llegar a ser desinhibido respecto a su relación, por lo visto maduraba rápido. Lo sujeto por las caderas con ambas manos por el limitado espacio en el que se encontraban lo mejor era no excederse: ayudo a Hayato a empujarse sobre su falo, uniéndose hasta el fondo de la sedosa entrada que se aferraba a él casi podía asegurar que se encontraba tan estrecho como la primera vez que lo hicieron. El agua también ayudaba a que fuese una experiencia placentera.
Declaraciones de ese tipo no salían a menudo de la misma forma con él por lo menos uno de los dos lo decía, en esta ocasión era Hayato quien representaba el lado amable de la relación, no significaba que él no fuese comunicativo solo hacía falta un poco más de tiempo.
– Nunca te dejaría salir de mi cama si me lo pides –¿se estaba convirtiendo en un adicto al sexo? follar todo el día no le parecía mala idea, le devolvió el mordisco en su clavícula un lugar donde seguro sería visto por cualquiera que pusiera atención.

Gruñó un poco ante su mordisco.Se acercó a su oido,mientras que movia un poco sus caderas,casi parecia un masaje mas que una penetracion,por lo suave de sus movimientos,placenteros y lentos.-..no quiero...que lo saques...-susurró.No es que no le diera verguenza decir eso,simplemente se esforzaba por decir lo que realmente pasaba por su cabeza.Dejó salir el aire de sus labios,ese aire rozó su oido con un cosquilleo.Era un iniciado en las relaciones sexuales,pero ganas y energia no le faltaban,y la experiencia la iba tomando con cada vez que lo hacían.
Sus movimientos hacían que el agua se meciese a su alrededor,la msima que ocultaba lo que estaban haciendo y sus sonidos.Se mordió el labio sensualmente,mirandole a los ojos.-...quiero hacerlo...tantas veces...como dias he estado sin tí....ése será tu castigo..por dejarme aqui solo....-dijo entre suspiros y leves jadeos.

No encontraba la manera de controlarse porque basto con decir aquello para hacerlo sentir infinitamente motivado, sin tapujos le hablaba sobre su deseo si pudiera quedarse enterrado entre sus piernas toda la vida, no se quejaría. Aparto sus bríos en pos de darle la mejor experiencia posible, se puso tan duro que tuvo que detenerse un segundo para no terminar a medio camino. Dio dos profundas inhalaciones para poder continuar, el que Hayato estuviera cerca de su oreja no ayudaba, sentía la suave caricia de su aliento estremeciéndolo hasta la medula. De buen agradado llegaron las palabras a él entendía perfectamente lo que quería, estar unidos de esa forma siendo uno demasiadas noches lo experimento el saberse conectado a la persona que anhelada estrechaba su vinculo, experimentar tal grado de enlace no se comparaba con nada parecido.
– Esta bien, acepto mi responsabilidad... solo que necesitaré mas de que una noche – diablos si en verdad lo deseaba hacer hasta no poder más.
Lo llevaba a su ritmo el placer debía disfrutarse no tenían prisa, controlando mejor sus bajos instintos, lo ayudaba con sus manos en las caderas de Hayato al ritmo que establecieron en un vaivén cadencioso los jadeos de su niño lo complacían, sabiendo que lo estaba haciendo bien; no dejo de repartir caricias y besos por todo su cuerpo, saboreando el dulce sabor de su piel. Recorriendo todo el camino desde sus provocadoras florecillas en su pecho hasta la tersa boca.

En su entrepierna se comenzaba a arremolinar la inevitable sensación del orgasmos aproximandose pero no importaba conocía bien su cuerpo: podía estar al limite para luego aguardar hasta el momento exacto.

-..Está bien..te dejo otra noche mas..-dijo como haciendole ese favor.Se aferró a su cuello mientras seguia moviendose a ese ritmo desesperante,le gustaba alargar ese acto,si no tocaba su miembro podria aguantar un poco mas,pero no pensaba lo mismo de Ziang,el cual estaba como una piedra.-..estas mas duro que antes...-como era posible que tras varios orgasmos aun tuviera semejante dureza?-...eres humano?....-preguntó sonriendole un poco mientras no cesaba en sus movimientos,que ahora eran mas explícitos.
Movió sus caderas a un ritmo mas rapido,si se propasaban un poco mas,el agua de la bañera terminaría por salirse.-...ahh...Ziang...quiero....sentirte...hasta lo mas profundo......-agarró sus cabellos con una de las manos,estirando levemente de placer.-..mas fuerte...-se levantó sacando su miembro y se apoyó en el borde de la bañera,a cuatro,con el trasero al descubierto,lo miró por encima de su hombro con los ojos llenos de placer.Aquello solo significaba que queria que él lo hiciera,que arremetiese con todas sus fuerzas y ganas.-...hazlo..como nunca lo has hecho..-él mismo se llevó la mano a su entrada,rozandola con los dedos y metiendo uno mientras Ziang se decidia a metersela.Si en ese momento le partía en dos poco le importaba.

Claro que era humano, ocasiones como esta no se presentaban a menudo siendo una persona sexualmente activa y teniendo una pareja dos semanas parecían ser suficiente para tener una considerable “necesidad”.
– Solo piense en hacerlo luego de este tiempo – gimió por lo bajo al perder la caricia de la tersa pared que envolvía su miembro, se volvería loco con las descaradas peticiones de su niño, claro que le gustaba de esa forma, prefería estar enterado de lo que Hayato quería para poder complacerlo. ¿Escuchaba bien? Le pedía placer llano y sin miramientos, su lindo novio se volvió en un corrompido ser lujurioso y eso le agradaba claro siempre q no le mostrara a otras personas su lado perverso, odiaría pensar en ser solo un juego ahora que en verdad lo quería.
Su mente saltaba de alegría ante la visión frente a sus ojos ¿le daría a su niño lo que apasionadamente le pedía? Por supuesto que lo haría, el sexo duro le excitaba en sobremanera apelando a su carácter de dominio que poseía. No muchos lograron ser dichosos de ver su lado poco amable, prefería que ambos disfrutaran por eso si a una de sus parejas no le parecía simplemente no entraba en la ecuación de su relación, siendo una persona que respetaba las decisiones de los demás se mantenía al límite peor todo podía cambiar si a su pareja le parecía bien... había una fina diferencia entre ser dominante y dominado.
No espero más para hacer con gusto lo que Hayato le pedía, aparto la mano del niño de su trabajo entusiasta en su propio trasero, llevándola al frente junto a la otra. Y así uso su fuerza para aprisionarlo bajo su cuerpo limitando sus movimiento fácilmente, bastaba con usar una de sus manos para apresar las de Hayato la otra la llevo al miembro de su pareja cerrándola en la base del duro pene con la suficiente para evitar que se corriera; sin lastimarlo, dándole una placentera y dolorosa sensación. Se enterró duro y profundamente sin más cortesías en el delicioso agujerito, sacando su pene inmediatamente luego de eso, luego una vez más entro, hasta la base de su pene sintiendo como sus genitales rozaban la pálida piel del trasero de Hayato siendo lo único que indicaba lo profundo que se encontraba dentro del cuerpo de su amante, comenzó las embestidas duras y sin remordimiento alguno, distaba de ser un acto sádico pero sabia no solo él lo disfrutaba los sonido que inundaban el lugar se lo decía.
Palabras de amor salían sobrando...

Miró sus dos manos siendo apreisionadas por la de Ziang,se veian tan pequeñas en comparación.En seguida notó aquel empujón algo brusco que hizo que su cuerpo se inclinase un poco hacia delante,dejó salir un gemido claro ante aquella penetración,que una tras otra le inundó de un fuerte placer.Iba a conocer una nueva manera de hacerlo,era algo fuerte,pero agradable y sobretodo placentero.Miró a Ziang por encima del hombro,no queria perderse su expresión.
Gimiendo aun mas cuando el mayor aprisionó su miembro entre su mano,ejerciendo cierta presión que evitaba poder eyacular normalmente.
El baño se inundó de humedos sonidos,tanto por el agua de la bañera como por el sonido de las penetraciones,y sus pieles chocando una y otra vez.
Nunca imaginó estar haciendo eso,y menos de esa manera,pero desde que lo había probado,no podia estar con él sin al menos hacerlo alguna vez.Amaba a Ziang,solo podria estar haciendo eso con él,solo de imaginarse que quien le hiciera eso fuera otra persona hacía que se le revolviera el estomago,no queria a nadie mas,solo a él.Aunque no podia negar que se estaba aficionando mucho a eso del sexo,quizas fuese por su edad.

Sus miradas se conectaron al voltear Hayato sobre su hombro, mirándolo en cada instante son apartar la mirada continuaba con su faena.
A pesar de la rudeza mantenía un margen en lo que hacía inhalaba el aroma de Hayato una fragancia embriagadora a su sentido del olfato. Todo se reducía al aquí y ahora, en su vida sintió tanta necesidad de poner sus pensamientos bajo el control de su cuerpo, “hacer el amor” no precisamente se podría llamarlo de la forma en que lo estaba haciendo en ese momento pero no cambiaba el hecho de hacerlo con la misma intensidad en sus sentimientos, increíble ver el cambio en él desde la última vez que amo a alguien.
Fragil y pequeño asi lucia debajo de él; “Hayato, Hayato...” un nombre que se repetía en su interior en cada penetración ya que de su boca solo salían las claras muestras de su pasión desbordándose en medio bajos gruñidos, en busca del orgasmo. Soltó las prisioneras manos llevando su furtiva mano en busca de entrelazarse en los delicados dedos de su preciado niño y poniendo a trabajar a la otra por fin bombeando el miembro de Hayato para que llegaran juntos al anhelado desenlace de placer y regocijo.
Aumento la intensidad de sus penetraciones, el agua caía de la bañera por la agitación producida en olas intempestivas chocando con la fina porcelana blanca. Sintió tensarse su abdomen en claro augurio de que se semilla inundara el interior de su amante. Amaba como sus cuerpos se

Hacerlo de aquella manera casi lo hacía desfallecer del placer.Gemia sin pudor alguno,las piernas le flaqueaban del mismo placer,y apenas podia mantener los ojos abiertos.
Su miembro fue liberado y masturbado,lo cual provocó una enorme oleada de sensaciones.
Sentía como su cuerpo de preparaba para el inminente orgasmo.
Sus manos buscaban sujetarse a alguna cosa mas estable mientras Ziang empujaba hacia su interior con fuerza,sentía como si fuera a romperse.Incluso un pequeño hilo de saliva asomó por la comisura de sus labios,no aguantaría mucho mas,gemia y jadeaba casi con desesperación,si no fuese porque las paredes estaban insonorizadas,toda la planta los estaría escuchando.
Unas estocadas mas y su miembro liberó aquella calida descarga junto a un último gemido de placer,tensando su cuerpo y dejando la mente en blanco mientras aquel intenso orgasmo duró.