Ayuda ~privado Ciel Phantomhive~

Estaba emocionado, ese día haría lo que muy rara vez se daba el lujo de hacer... ayudar a alguien por iniciativa propia! estaba emocionado! se habái enterado de que a "cierta personita" le gustaba alguien y ahora quería hacer todo lo posible por ayudarlos a estar juntos! ¿qué podía hacer? era alguien tan dedicado y altruista -si, ajá- que le nació ayudar a nada más y nada menos que a... Ciel Phantomhive; claro! al inicio el chico se había negado rotundamente, pero al final habían terminado con una "cita" programada para esa misma tarde en su habitación.

-oh vamos ciel!! llega ya! ya! ya!!

Estaba desesperado, tenía montones de ropa en la cama y en un sillón cercano, quería que Ciel modelara muchos modelitos, shorts cortos, algunas faldas y unos cuantos vestidos... y si alguien se lo preguntaba, si... eran suyos... Puso un poco de música en el estereo y espero a que Ciel llegara para poder iniciar con su malev.... es decir, con su maravilloso plan.

No sabe ni como ni por qué se dejó convencer por el maldito rubio. Ya solo sabía que iba de camino a la habitación de este, dispuesto a sufrir torturas con vestidos de todo tipo sobre su pálido cuerpo, más pintauñas por una lado y por otro. Llega asta la puerta de la habitación, y vacila un poco en si tocar o no la puerta de este, a veces siente que hace cosas absurdas convencido por personas absurdas, aún así, Alois parecía su amigo de verdad. Vacila unos momentos asta que, sin llamar, entra suspirando, esperando que el otro no le chillase por llegar algo tarde.

-tardaste!!!

Chilló en cuanto vió a Ciel pasar por la puerta de su cuarto, sin embargo trató de no tomarle tanta importancia y corrió a pasarlo al cuarto y cerrar la puerta detrás de él, comenzando a "pensar" en que es lo que le gustaría para que el chico vistiera.

-pero no importa, ahora!! ven! mira! encontré un montón de cosas en mi guardarropa que seguro te quedan divinas!!!
faldas, shorts, vestidos...

Comentaba muy emocionado y mientras mencionaba alguna prenda se la mostraba al chico con gran entusiasmo, para finalmente acercarse a él y comenzar a sacarle la camisa sin decir nada más.

-esta muy fea, debes usar cosas más lindas!! como esperas gustarle a Sebas-chan si no vistes como un chico lindo!?

Toda esa ropa le repugna un tanto, la considera de mujer, muy de mujer. Mira al rubio con los ojos entonados, confuso al ver aquella ropa, desde luego no sabía que ponerse, más que nada porque todo aquello no le llamaba en nada la atención, y no sabía si a Sebastián le iba a gustar. Desde luego, su estilo no era, pero la ropa le podría, podría, quedar linda, pero le preocupaba en el fondo acabar aparentando una mujer. Se limita a gruñir a regaña dientes, ya que había aceptado aquel favor y quedaría feo si ahora le daba calabazas, aunque la tortura ya empezaba, notando como el pervertido de Alois le sacaba la camiseta, en ese mismo instante se echa la manos al cuerpo sonrojado, cubriendose.

-jajajajaja que haces!? -no pudo evitar reir a carcajadas en cuanto vio que Ciel se cubría el cuerpo al instante, para lo que tomó las manos del chico y le hizo terminar de quitarse la camisa- ya, ya, no tienes nada que yo no tenga y que no haya visto ya antes en alguien más-le guiñó el ojo, demostrando una vez más lo promiscua quehabía sido su vida.


-en fin.... veamos, que te quedaría bien?

sin más comenzó a revisar entre las ropas hasta dar con una playera que tenía el dibujo de una ranita feliz como estampado,eso no era sexy... pero moría por ver a ciel vistiendo eso, así que aguantando la risa lo mejor posible se acercó y comenzó a vestirlo con la misma.

-esto te quedará perfecto! jejeje

Si, promiscua su vida no, su vida había sido una completa orgía de sensaciones sexuales con sodomización incluida. Toma la camiseta, la cual a simple vista, de sexy, no le resulta nada, más bien algo tan poco elegante como las platas de perro. Más no, no podía negarse, había aceptado y ahora estaba obligado a hacer lo que el otro le pidiese, o por lo menos casi todo. Toma la camiseta y tragando saliva se la pone, comenzando a arrepentirse de ello, cada momento que pasaba en la habitación del rubio se sienta cada vez más como "Prety woman". Mira al rubio un par de veces, para después refunfuñar.

-Tsk... Alois... ¿Esto es sexy? -pregunta enarcando la ceja-

Trató de aguantar la risa lo más posible pero en cuanto le preguntó aquello no puo evitar soltar una carcajada a la vez que tomaba su celular y le tomaba una foto al un molesto ciel, simplemente no había podido evitar aquello.

-jajajajaja perdón, perdón!! pero te ves tan lindo! jajaja em... es decir... si... verás existen dos tipos de chicos! los que son naturalmente sexys como yo -le guiña un ojo- y los del tipo violable.... -lo señala sin vergüenza alguna- y según mi opinión eres del segundo tipo!

Tanro la risa como la foto del celular le daban de sobra razones para darle un par de guantazos, el no se andaba con "chiquitas" y todo esto le molestaba casi tanto como que le avergonzasen en público, aunque de forma un tanto indirecta era lo mismo. En vez de levantarle la mano al rubio, se limita a dar dos toses para insinuar que esto no le agradaba, con un pequeño rubor en las mejillas.

-N-ne! No soy violable... ni nada de eso... -Para el, esas palabras solo podían hacer referencia a una mujer, no a un hombre como el.

Al notar la moestía de Ciel decidió dejar de lado el celular, despues de todo no quería que se fuese de ahí sin haberle probado algunos cambios de ropa más, le sonrió un poco y se giró a su cama donde tenía gran variedad de prendas.

-bien, veamos que tan buen gusto tienes! por aquí hay camisas -dijo señalando un área de la camadonde se podían apreciar doenas de prendas, para luego seguir menionando las "secciones"- por acá hay shorts y pantalones, no creo que quieras... pero en aquella silla tengo un par de vestidos y en aquella otra un par de faldas, escoge lo que mas te guste!


Por supuesto y aun entre tanto ropa no habia prenda alguna que fuese con el sobrio estilo del heredero phantomhive, por lo tanto estaba prácticamente "forzado" a vestir algo que alois usaría.