Habitación 301 [Priv. Miharu~] [+18]

[D:!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! golpe bajo!!!!!]

-Quizá no aguante mucho pero.. -tocó su estómago con la mano derecha y bajó mano izquierda a una las piernas del menor. -Entonces te obligaré a que me digas... ¿sabías que estoy loco, no?

No quería amenazarlo, pero si algo odiaba era que lo dejaran con la duda. Y aunque no pudiese verlo desde esa pocisión, tenía un mirada sombría que hubiera hecho a cualquiera huir de ahí de inmediato.

D si miru es un amor!!! hey! ya viste lo de miru en "persona que amas"? XD)


Eso sonaba peligroso y aquella mano se sentía aun más peligrosa que la voz y aun peor, el aura "maligna" que podía percibir del otro, quizá lo mejor sería mentir un poquito respecto a su edad, pero luego cuando le dijera la verdad no sabría como justificarse, eso si que era dificil....

[color=blue]-tengo.... 14 años....

Comentó finalmente, lo había dicho y si al otro no le parecía.... ni modo... tendría que soportarlo.

[*-* aww qué lindo.. jojo ahora es de Shin +w+]

Soltó una carcajada, tanta maldad echada a perder~

-¿Eso era todo? hahahahaha no es tanto. Aún eres joven pero eso no importa. Lo que importa es que tengas aquí -dijo subiendo su mano a su corazón- y acá -dijo dándole un beso en la sien.

-Aunque ahora que me doy cuenta, ¿qué hacía alguien de 14 años solo en la playa?

-no mucho piensan eso... gracias

Ahora se sentía más calmado, aunque claro, como siempre tenía que surgir una pregunta incómoda.

-pues.... nada en especial.... lo que hace todo chico de mi edad solo en una playa... huir de casa, aunque, en realidad no planeaba "no volver" el día que te encontré.... ese día iba a volver.

-[b][i][color=indigo]Hubo alguna razón para que quisieras huir, eso es obvio pero me pregunto qué pudo haberte pasado para haberlo hecho. Si tú quieres contarme, puedes hacerlo sino, no tienes porqué hacerlo.[/color][/i][/b] -tomó una de sus manos y la apretó levemente, luego la entrelazó con la suya.

Ok, sí, el chico era joven para pensar, digamos, "coherentemente"; pero si le decía algo que estuviera fuera del tema quizá se enojaría y no quería eso. Sabía que, todos tenían una razón para sus actos y que a veces escapar es necesario antes de que explotes.

Tal vez lo aprendió de la peor manera, pero aprendió a carne propia. Y lo peor de todo era que, si Miru hablaba de problemas con sus padres no sabría manejarlo de la mejor manera. Precisamente el concepto de "familia" no estaba "correcto" según él.

De cualquier forma, trataría de ayudarlo si un problema surgiera. Haría todo lo posible para que se sintiera bien.

-no hubo una razón especifica, de hecho no tengo problemas con mi tía, solo quería despejarme, en ocasiones lo hago, no quiero ver a mis amigos, ni mucho menos a mi molesto profesor, tomo mis cosas y le digo a mi tía que me quedaré en casa de un amigo... se siente bien estar lejos de todo, relajarse, solo eso, no hay ninguna otra razón en especial, no me pelié con nadie, no tuve problemas graves, solo.... quise ser libre....

Jugaba con la mano ajena un poco, acariciandola, le gustaba la cálidez y la sensación de compañía que el otro le daba.

-espero nunca querer escapar de ti... así que cuidame

Comentó a manera de broma, volteando a verlo de reojo.

-¿No te estarán buscando? -dijo algo preocupado, tenía 2 hermanas menores, sabía los problemas en los que luego se metían los más jovenes.

Dió un suspiro largo, tratando de calmarse a sí mismo. Dió gracias a que Miru lo estaba tomando de la mejor manera, eso ya era un punto a favor.

-No aceptaré que escapes de mí -dijo fuera de sí, como si fuera otro y no la persona a la que Miru estaba acostumbrado. -Mataré a quien se te acerque.

-no, mi tía ya sabe que así soy yo, escapo de casa desde los 12, me buscara si no llegó la próxima semana.

Notó algo extraño en la voz ajena y en el tono en el que lo dijo, pero no estaba del todo seguro, quizá solo había sido su imaginación.

-no tedrías que matar mucha gente en realidad... solo tengo.... 4 amigos, pero no los mates, me agradan, aunque no lo parezca

-Sólo quiero que lo sepas. -comentó serio, aunque quería regresar a su habitual humor le costaba un poco de trabajo.

Tragó saliva y cerró los ojos en un intento de serenarse y buscar esa paz en sí mismo. -Si alguien te hace daño no dudaré en vengarme de ellos. Sea quien sea, Miru. Incluso si yo te hago daño alguna vez, estoy dispuesto a irme de este mundo -comentó, hablaba en serio.

Estaba haciéndole una promesa, un juramento que respetaría hasta el fin de sus días. Tal vez al momento Miru no lo comprendería ni mucho menos, pero él, siendo mayor, sabía a lo que se estaba enfrentando.

Entonces como balde de agua fría, se acordó de algo que recien había dicho. -Espera, espera.. eso quiere decir que ¿volverás dentro de una semana?

Trataba de entender las palabras ajenas pero le parecia algo un tanto confuso, pero no tuvo demasiado tiempo de pensarlo, ya que la pregunta del otro le cambio el tema drásticamente.

-bueno, supongo que debería hacerlo, nunca me ausento más de dos semanas, así que si, la próxima semana volveré....

Quizá las cosas no iban tan bien como lo pensaba, ahora se daba cuenta de que había dado por hecho que al volver Shin iría con él, pero.... al parecer no sería así, se separó un poco y volteó a verlo.

-tu.... te quedarás aquí?

-No lo sé, Miru. Ahora mismo también estoy huyendo. -se apretó el puente de la nariz, como quien no sabe que hacer.

Sintió como el otro se separaba de él y entonces, y sólo entonces, fue cuando se dió cuenta de que había cometido un error al preguntarle aquello. -Todo el mundo cree que estoy muerto. No puedo ir a cualquier lugar, por eso busqué esta playa.

Se pasó la mano por el cabello y lo peinó hacia atrás con desesperación -¿Es muy lejos tu hogar? Quiero ir contigo pero... sólo dime dónde queda.

Al inicio se sintió mal, porque era cierto, no podía solo pensar en él, pero con forme el otro hablaba, al parecer todo se arreglaba a sus conveniencias, Shin estaba huyendo y su hogar sería un escondite perfecto.

-es un pueblito olvidado de la mano de dios, esta cerca del bosque, es un lugar tranquilo y lindo, nadie se mete en los asuntos de los demás.... creo que para ti, es perfecto... o... eso pienso

Sus palabras parecieron agua para quien ha caminado en el desierto durante días..

-Está decidido entonces. Iré contigo. -impuso aunque no estaba seguro si su familia le diría algo por llegar con un desconocido, y peor, con esa cara de matón que tenía.

-Aunque.. ¿si nadie se mete con nadie, te vas de ese lugar porque quieres estar solo? -preguntó algo confundido, era contradictorio pensar que si un lugar es tranquilo y solitario, uno quiera más soledad. Algo no estaba bien del todo, pero trataría de dejar las cosas como estaban, por el bien de los dos.

Puso una mano en su mejilla y lo atrajo hacia sí, le dió un beso en los labios y se recargó en su hombro. -Ojalá estemos bien allí.

-lo estaremos.... estaremos bien....

Susurró suavemente, dandole un medio abrazo, acariciando su cabello, sabía que era difícil de comprender, a decir verdad nadie lo hacía, pero así era él, distinto, extraño y solitario, aunque quizá ya era momento de cambiar un poco eso último.

No quería asustar al otro, así que lo mejor sería no decir nada acerca de lo que había dentro de el, llevó su mano suavemente a su pecho, casi podía sentir el Shirabansho latiendo en su interior, él solo quería vivir tranquilamente...

-Y dime, ¿tienes hermanos o hermanas? -dijo mientras se hacía hacia atrás, dejándose caer por completo en la arena, sólo reteniendo a Miru con sus piernas. -Yo tengo dos hermanas, son las únicas que saben que sigo vivo. Quisiera algún día presentartelas.

Dió un suspiro, quizá lo necesitaban pero.. "ellas son fuertes", pensó. De cualquier forma, y a cualquier distancia, las protegía. Quizá.. demasiado.

-Yo siempre quise tener un hermano. Creo que no es lo mismo que un amigo, quizá haya algunos que son casi como hermanos, pero no hay nada como un lazo de sangre -divagó, casi para sí mismo.

Miró el cielo y se hizo sombra con un brazo, el sol le lastimaba los ojos. En esos momentos deseaba que lloviera pero ¿qué posibilidades hay de que en la playa llueva a plena mañana?

-no tengo hermanos.... ni siquiera tengo padres, ellos murieron cuando yo era muy pequeño, tengo una foto de ellos, pero no los recuerdo, por eso vivo con mi tía, tenemos un puesto de comida, no me gusta presumir, pero soy bueno cocinando...

Comenzó a jugar con la arena con el dedo, formando distintas figuras en ella.

-muy pocas debo admitir, en el pueblo llueve seguido, pero aquí no....

Y maldito fuera el momento en que se distrajo y el momento en que leyó aquel pergamino para leer mentes y sobre todo maldita fuera "el hada del shirabansho"

-Espera.. ¿qué dijiste? ¿cómo supiste lo que pensé? -hizo que hiciera una flexión volviendo a quedar sentado.

Ok, comenzaba a admitir que este chico era especial en más de un aspecto... Simplemente Perfecto.

-eh? que?

Ok, lo había arruinado, ahora solo quedaba intentar una "retirada estrategica"

-lo dijiste en voz alta, yo no puedo saber lo que piensas

-No-oh~ Yo sé que lo pensé. Jamás lo dije en voz alta. -hizo que volteara a verlo y se acercó a su rostro, como si lo inspeccionara el viejo Roshi (XDDDDDDD)

-Tú no eres normal. No me mientas.

Y bien, todo se había ido a la basura, se separó del otro poniendose de pie, cuanto hubiera dado por nacer normal y ahora el otro se lo hechaba en cara, estaba harto de que todos le dijeran que era "especial".

-no pasó nada! lo dijiste en voz alta! yo... yo soy normal!

-Tranquilo. ¿Qué te sucede? -preguntó realmente extrañado, se levantó de igual manera y lo tomó por los hombros, no dejando que escapara si eso quería hacer.

-¿Por qué te alteras tanto? -entrecerró los ojos, y trató de estudiar sus facciones, si mentía, se daría cuenta de inmediato.

Desvió la mirada casi de inmediato, no quería que lo viera de esa manera, respiró profundamente tratando de calmarse, quizá estaba sobrereaccionando a la situación.

-a ti.... te molestaría que no fuera normal?

-Dime algo, ¿Y crees que yo soy normal? -entonces lo soltó y se dió la vuelta, él tampoco era "así" y había sufrido por sus padres, de quienes menos se lo imaginaría... no lo juzgaría, no era quien. Además ¿qué importaba? Eso era lo de menos.

-Lo normal es aburrido. Y no estaría aquí si fueras aburrido. -comentó algo serio, tratándo de convencerlo.

Una sonrisa adornó sus labios sin esperarlo, Shin le había hecho sentir bien, a pesar de que su expresión fuera seria y la mayoría de la gente se hubiera sentido intimidada, a él le había reconfortado, se abrazó al otro, pegando su frente en el pecho del otro.

-creo que deberíamos ser sinceros entre los dos, no? Hemos decidido mantenner nuestras preguntas calladas, mejor hablar...

Lé correspondió el abrazo y lo escuchó atentamente. Pensó que quizá sería muy "arma de dos filos" contarle todo. -Si lo hago, te alejarás de mí. Pero... aunque sea poco a poco, ¿si? tampoco hay que poner mucha presión sobre los dos.

Carraspeó la garganta por un aire que había, al parecer sí iba a llover. Qué mejor... le encantaba la lluvia. -¿Te gustaría mojarte bajo la lluvia?

-tienes razón

Quizá los secretos se irían revelando poco a poco, lo mejor era no acelerar las cosas, volteó a ver el cielo, no veía nubes....

-si me gustaría, pero no parece que vaya a llover.

-¿Cómo sabes? ¿Cómo sabes que no puedo hacer que llueva? -lo retó, divertido.

Bieeen.. podría hacerlo, pero no sin "algo" de ayuda. En fin, dejó ese tema por detrás.

-¿Quieres que vayamos a buscar algún lugar escondido en el mar? Siempre quise subirme a una moto acuatica.

-jajajaja yo sé que TU no puedes hacer llover porque ni siquiera YO puedo hacer llover... aún....

sonrió ampliamente y dejó aquella tonta plática de lado.

-si, em encantaría subirme en una moto acuatica

-Pues anda, vamos a buscar unas motos. -Tomó su camisa y ya seca se la puso, se acomodó el cabello y de juego, le puso sus lentes a Miru.

-Hahahahaha mira, qué guapo te ves. -sonrió de manera lujuriosa y le guiñó un ojo. Lo tomó de la mano y caminó a su lado hasta donde hubiera alguien que pudiera rentarlas.

Se acomodó los lentes y puso una pose sexy y de "chico malo", nunca había hecho algo tan infantil y tonto como eso, pero en ese momento fue divertido.

-oh, es que yo soy tan sexy!

Caminó junto al otro ya más "normal" debía dejar sus divagaciones de lado.

Le dió tanta risa que hiciera esa pose que no pudo contener una carcajada. Aunque en realidad, era sexy. Pero prefería al Miru normal.

-Eso ni dudarlo. -rodeó sus hombros con el brazo izquierdo, y lo atrajo hacia sí, le hizo "un cerillito" [XDDDDDD] y luego lo dejó en paz pero su risa aumentaba y aumentaba.

Se veía demasiado infantil para su tamaño y edad, pero se estaba divirtiendo y hasta lo más estúpido era divertido..

-ahh! no! no hagas eso!

Le dió un par de manotazos para que dejara de "lastimarlo, para luego caminar a su lado , no quería admitirlo, pero era divertido estar con Shin.

-ahora que lo pienso.... nunca había tenido un novio.... es extraño, pero se siente bien

Dijo eso y se sintió un poco extraño, la verdad era que tampoco había tenido novio pero sí novia y bueno.. quizá no era la gran diferencia, además, Miru era tan lindo que no importaba si así era. Al fin y al cabo sabía que lo que dijera la gente no era importante.

-Ni yo, pero.. estoy de acuerdo contigo. Me haces sentir un niño, pero ahora estoy consciente de lo que hago. -dijo mientras le despeinaba un poco el cabello, le había dado un codazo leve, como si fuera uno de sus mejores amigos.

Se paró enfrente del mayor, impidiendole el paso, aunque no era nada malo lo que planeaba no podía sonreirle en esta ocasion aunque lo intentara, estaba un tanto avergonzado aunque no lo pareciera.

Se acercó al otro un paso más y le tomó con las manos por las mejillas, se paró de puntitas y lo besó suavemente, se sentía nervioso de que esta vez si estuviese despierto, además que... era su "primer beso" como novios, no sabía porque pero sentía algo diferente.

Al principio le extrañó un poco su actitud, no tanto porque se había callado y había mantenido una mirada "un tanto seria". No. Sólo por el hecho de que cuando menos lo pensó, sintió las manos ajenas en sus mejillas, y un beso de parte de Miru.

Cerró los ojos y le correspondió, rodeó su cintura con las manos y lo atrajo hacia sí. Dejó que todo fluyera como tenía que ir, no hizo otro movimiento, no quería arruinar el momento. Además, como Miru había tomado la iniciativa, se sentía por las nubes aunque tuviera los pies en la Tierra.

Se pegó al cuerpo ajeno, manteniendose aún de puntitas, sus manos pasaban de posarse en sus mejillas a abrazarlo por el cuello, no quería separarse de sus labios, a pesar de que el beso era suave y calmado aún, sin embargo sentía como sus pies se cansaban e iba a tener que separarse de los labios del otro.

-mnh....

Sonrió mientras lo besaba, entonces, lentamente se fue separando. Lo había disfrutado, era tan simple que no necesitaba nada más, o al menos, así se sentía.

-Pensé que nunca lo volverías a hacer. -dijo, refiriéndose a cuando lo beso mientras estaba "dormido". -Miru, eres tan lindo... -lo abrazó fuertemente, como si eso pudiera unirlos de manera diferente, exclusiva, ...atenta.

Se separó de sus labios aunque no quería, pero cuando lo hizo se sentía extraño, casi como si flotara en los brazos del otro, se sentía realmente bien.

-volver.. a hacerlo? entonces tu....

Si pensaba que no podía avergonzarse más, definitivamente estaba equivocado, ya que en ese momento sus mejillas se pusieron completamente rojas.

-¿Creiste que no me daría cuenta? Tengo buenos reflejos. -le dijo, trantando de tranquilizarlo un poco.

-Pero.. me gustó mucho que tomaras la iniciativa.

Acarició su cabello y luego le dió un beso en la frente.

-ahora comienzo a arrepentirme...

Susurró algo avergonzado, si, ahora que lo pensaba, él le pidió "formalizar" aquella relación, él lo besó primero y ahora que lo pensaba se sentía algo tonto.

-¿Qué sucede? -comentó algo preocupado e intrigado al mismo tiempo.

-Miru, no te preocupes por cosas triviales. No importa quién empieza o cómo lo hace... -se detuvo- bueno, sí. Sí importa. No soy un uke, pero soy un seme servicial -bromeó y lo despeinó un poco, de alguna manera el ambiente se había tensionado y no quería que Miru se sintiera, de alguna forma, incomodo.

Uke? seme? no estaba seguro de lo que eso significaba aunque.... creía haberlo escuchado antes, uke era cuando..... Sus mejillas se pusieron completamente rojas, no había pensado en aquello para nada, pero al parece shin ya lo había hecho y aunque era lógico, todo señalaba que... bueno... a él era a quien le dolería.

No pudo evitar que su cabeza comenzara a divagar, poniendo mil y un imagenes distintas de Shin y él, giró la cabeza repetidas veces, quería sacar aquellas imagenes que lo avergonzaban de su mente.

Movió la cabeza, aun sin comprender tanto, al menos al principio.

Luego lo vió completamente rojo y supo que se estaba imaginando cosas de más.. era tan divertido verlo así que no paraba de reirse.

Ya el estómago le dolía de tanto reirse, que se tiró a la arena xD y se debrayó de la risa. No sabía que era más divertido: no poder parar de reir, o ver a Miru imaginandose tantas cosas.

Se le quedó viendo como se reía, estaba avergonzado por lo que estaba pasando, no había sido su intención que su mente divagara, y mucho menos que su ahora novio se burlara de esa manera de él.

-sigue riendote!

Antes de que Shin dijera algo más se siguió caminando lejos de él, un poco más rápido.

Aún riendo y en la arena... Dios, era simplemente divertido.

Pero luego le cayó como balde de agua fría al ver que se estaba llendo. Flexionó las piernas y se levantó en un impulso de las mismas.

Corrió hacia él y cuando lo alcanzó, lo abrazó por la cintura. -Si quieres haremos TODO lo que te imaginas -dijo un poco burlesco, era increiblemente chistoso verlo así.

-Ahora, mañana, o cuando quieras, eso no será impedimento.

El abrazo se había sentido bien, era dulce y por un momento pensó en perdonarlo, hasta que habló.... ¿cómo podía decir eso tan fácil!!!??? Sus mejillas se pusieron completamente rojas, ni siquiera quería recordar lo que había imaginado y el otro ya le estaba proponiendo hacerlo!!


-n...no llevamos ni un día de novios y ya me quieres llevar a la cama? Vaya que eres un pervertido....

Agradecía que en realidad no fuera penoso para hablar, de lo contrario no hubiera podido decir algo tan sencillo como aquello, ni como lo que estaba a punto de decir.

-dime, a poco con tan poco ya te la puse dura?

Alejó su cadera de él, ¡¡ni siquiera se había dado cuenta por sí mismo!! Ahora tendría que "quitar" el efecto con.. o sin Miru.

Sonrió de medio lado y le volteó la cara con la mano derecha para que lo mirara fijamente -El problema no es lo que hayas hecho, sino que tendrás que encargarte de ello.

-oh no, yo no he hecho nada, así que... te haces cargo tu solo cariño

Le besa la mejilla con cariño, aunque se separa viendolo con una sonrisa burlona.

-debes de hacer algo más que solo decirlo para obtener aquello que buscas

-Oh sí, sí. Tú lo hiciste. -hizo una mueca de disgusto porque no haría nada para solucionarlo. -Entonces quédate aquí. Ahora regreso.

Dió un suspiro resignado, lo soltó y se fue caminando hacia otra dirección donde no hubiera gente ni tampoco ruido.

"Quitó" el efecto y después de unos minutos regresó a donde esperaba que Miru seguiría. Había sido algo chocante el hecho de que ni siquiera se había dado cuenta. Y se preguntaba a qué hora había sucedido eso. Normalmente no pasaría nada más porque sí pero eso ya era darle muchas vueltas al asunto.

Se quedó donde el otro le había dicho, algo molesto cabía decir, esperaba que por un lado le pudo haber insistido o si quería algo así llevarlo de vuelta al hotel, aunque.... mejor ya no pensar en ello, se quedó un par de minutos ahí pero fue demasiado y antes de que el otro dijera algo, se fue de regreso al hotel en el que se hospedaba Shin, quizá si pensaba que lo había perdido pusiera más empeño la próxima vez, o... quizá solo darle u susto y una sorpresa.